Que el alumno:
 Conozca qué es el pecado, cómo destruye nuestro ser y el poder que puede llegar a tener sobre un cristiano.
 Conozcan el área de acción del pecado y cómo podemos vencerlo.

 El pecado es un cáncer que enferma el espíritu del hombre hasta lograr su muerte.
 El pecado puede llegar a gobernar el alma y el cuerpo totalmente y hacer de una persona un instrumento de pecado.

Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
(Romanos 5:12)

I. Pecado

 La traducción literal del griego en la palabra pecado es: errar el blanco y así no se puede participar del premio, errar.
 Pecar es no llegar a la medida que debemos dar cada día, es no alcanzar la meta de la santidad.
 Si pecamos no podremos alcanzar el premio del supremo llamamiento, si vivimos una vida de pecado no podremos estar presentes en el arrebatamiento.
 Todo aquello que se aparta de lo justo y puro, todo aquello que se sale de la palabra de Dios es pecado.
 Es la violación del orden moral de origen divino. Nosotros debemos de morir al pecado.
 El pecado trabaja de varias maneras que nosotros debemos de conocer para poder vencer.

II. El cuerpo de pecado. Romanos 6:6

 El cuerpo de pecado es nuestro viejo hombre así lo declara Pablo en este pasaje.
 El cual debe de ser destruido con el propósito de que él no nos destruya a nosotros.
 Destruir en su raíz griega implica: dejar enteramente inmóvil, inútil.
 Si nosotros no inmovilizamos completamente el cuerpo de pecado seremos reducidos una vez más a esclavos del pecado.
 Por supuesto que la Biblia nos muestra con claridad como destruir el cuerpo de pecado. Hay que crucificar el viejo hombre.

III. El pecado y sus deseos. Romanos 6:12

 “No reine, pues el pecado en vuestro cuerpo mortal.” La palabra reinar tiene otras traducciones que son: gobernar, tener soberanía desde el cimiento de poder.
 El cuerpo mortal no es lo mismo que el cuerpo de pecado. El cuerpo mortal es nuestro cuerpo biológico. La palabra mortal se traduce como culpable de muerte.
 Los deseos o lujuria como lo traduce la versión de las Américas. Su primera traducción en el griego es: el deseo por lo prohibido.
 Si permitimos que el pecado gobierne en nuestro cuerpo, automáticamente vamos a obedecer a sus malos deseos.
 Un ejemplo: el pecado tratará de apoderarse del centro de placer de nuestro cerebro, si lo permitimos el único placer que nos va a satisfacer estará ligado con el pecado.

IV. La paga del pecado. Romanos 6:23

 Debemos reconocer que el pecado trae consigo placer, el pecado no es como tomarse una bebida agridulce la cual nuestro paladar rechaza totalmente.
 El pecado es un alimento agradable a nuestro viejo hombre, el cual busca alimentarse de pecado.
 La Biblia dice que la paga del pecado es muerte. Una de la traducciones del griego para muerte es: mortandad = multitud de muertes causadas por epidemias, cataclismos, pestes o guerras.
 Si nosotros permitimos que el pecado siga cohabitando en nuestro ser vamos a recibir la paga del mismo. Por eso hay muchos enfermos de su cuerpo, otros enfermos de su alma, otros pobres, etc.
 Hay gente que se atreve a decir yo peco y no muero, porque cree que morir es únicamente dejar de respirar.
 Si somos honestos y hacemos un inventario de nuestra vida (espíritu, alma y cuerpo) vamos a encontrar varias áreas de nuestro ser con epidemias, pestes, guerras internas, etc.

V. La ley del pecado. Romanos 7:23

 Al hablar de ley debemos conocer tres cosas importantes:

1. Las leyes pueden ser aprendidas.
2. Las leyes son independientes.
3. Las leyes traen consigo consecuencias.

 Pablo habló de la ley del pecado. El apóstol dice que aunque quiere hacer el bien; es decir, aunque tiene un deseo de hacer el bien, ha aprendido a hacer el mal, esto es una ley.
 El apóstol descubre una ley diferente en sus miembros que es independiente a la ley de Dios, la cual combate contra la ley de su mente y lo encadena a la ley del pecado que está en sus miembros. Las leyes son independientes.
 Ahora Pablo exclama ¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte? Recordemos que las leyes traen consigo sus consecuencias.
 Concluimos diciendo que la única manera de vencer el cuerpo de pecado es hacerlo morir con Cristo Jesús.

 ¿Cómo se traduce la raíz griega de pecado?
Errar en el blanco.

 ¿Quién es el cuerpo de pecado?
Es el viejo hombre.

 ¿Qué implicación tiene que el pecado reine en nuestro cuerpo mortal desde su traducción griega?
Gobernar, tener soberanía desde el cimiento de poder.