En el post pasado hablábamos de cuan dispuesto estamos de recibir el amor de Dios en nuestras vidas y que desea de mi. Entendemos que solo con cosas efímeras, poco constantes vamos agradar a Dios.
y que como nosotros cambia de opinión.
Dios no tiene forma de variación, Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. Hebreos 13:8
Los afanes han obstaculizado que nos acerquemos y nos entreguemos a Dios, pero el nos pide que entreguemos nuestras cargas e iniciemos a deleitarnos en el.
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Mateo 11:28
Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón. Salmos 37:4
Deléitate en el maestro, déjate envolver por su amor. Este que cubre multitud de faltas. El no busca perfección, sino un corazón dispuesto.
Te atreves aceptar su regalo, la salvación?
Oremos:
Señor Jesús, te doy gracias por tu misericordia, porque día a día estas conmigo
nunca me has dejado. Reconozco que sin ti nada soy, que necesito de ti, pido perdón por mis pecados y quiero ir donde me quieras llevar. Eres el salvador, mi Dios. Me entrego a ti. En el nombre de Jesús, amen.
PD: Si hiciste esta oración escríbenos, personas te ayudarán. Dios es bueno. Nunca se te olvide.
#SonrieEsGratis
MIL BENDICIONES A TODOS,
Liz Lora
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