El libro de Apocalipsis nos presenta una poderosa escena en la que los veinticuatro ancianos se postran delante del trono de Dios y colocan sus coronas a Sus pies, declarando: "Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas" (Apocalipsis 4:10-11). Las coronas en la Biblia simbolizan recompensas eternas y autoridad espiritual, otorgadas por Dios a Sus fieles. Para los cristianos, son una motivación para perseverar en la fe y una expresión de gratitud y reconocimiento de que todo proviene de Él.